martes, 27 de septiembre de 2011

Reseña sobre la muestra "El color en el espacio y en el tiempo"

"Vivir el color"

Artista: Carlos Cruz-Diez
Malba - 21 de septiembre de 2011 al 5 de marzo de 2012
Publicado en ramona web


Situar al color en el espacio y el tiempo. Esa ha sido la misión teórica y práctica de Carlos Cruz-Diez, artista venezolano nacido en 1923, a lo largo de su vasta carrera artística. Lo ha llevado a experimentar con diversos materiales y técnicas, así como en distintos campos como la pintura, la escultura, la arquitectura.
Si bien se lo ha catalogado como un “artista cinético”, el término excede su producción en tanto el movimiento no ha sido su única búsqueda plástica. Bien lo aclara Mari Carmen Ramírez en el folleto al que accedemos en el MALBA: compartió ciertas afinidades con el grupo, así como ámbitos de exposición, pero fue más allá de las premisas cinéticas.

Recorriendo la muestra, el espectador se ve inundado por el color. El mismo ha sido el punto de partida de la obra de Cruz-Diez, considerado como elemento atemporal del arte. Se libera de la bidimensionalidad, del plano, para incorporarse en el espacio y en el tiempo, libre de toda carga cultural. Vale como elemento primario para las investigaciones del artista, vale para la obra y en su relación con quien la contempla. Es el elemento clave, que permitirá que el espectador participe, se convierta en alguien activo frente a la obra. Porque, al ser el color algo que sale del lienzo “hacia afuera”, invita a cierta participación física, es percibido como lo fundamental, más allá de la geometría construida en los cuadros. Por ejemplo, muchas de las obras de la serie “Las Fisicromías informales” (1961) nos despiertan la necesidad de caminar de un extremo al otro del cuadro, en un ida y vuelta que modifica nuestra percepción de las mismas. Nos sorprendemos, nos admiramos, descubrimos, en el juego que se establece entre nosotros y la obra, nuevas formas de percibirla. El color es una presencia que se extiende más allá del plano, entrando en contacto directo con quien está observando. Esto es lo que diferencia a Cruz-Diez del arte cinético: como antes mencionáramos, no va en busca del movimiento dentro de la obra, sino que se vincula más con cierta línea de investigaciones que se dieron desde el siglo XX acerca del color como entidad autónoma. Cabe mencionar aquí a artistas que teorizaron sobre la temática como Klee, Kandinsky y Sonia Delaunay. 

Aquí no encontraremos un uso descriptivo, literario, decorativo ni metafórico del color. El color es libre, tiene vida propia. Y su vida se une a la de cada uno de los que se para frente a la obra. Lo cromático se introduce en lo cotidiano como podemos ver, por ejemplo, en las intervenciones de Cruz-Diez en edificios y la vía pública, sus proyectos arquitectónicos, inclusive en dos ambientaciones que se pueden recorrer en la muestra en las cuales nos sumergimos dentro de la concepción del artista, poniendo el cuerpo en el recorrido y percibiendo al color en el espacio y en el tiempo, en tres dimensiones. Así lo vivenciamos: quien entra en estos espacios es invadido, rodeado, “tocado” por el verde, el azul, el rosa, las líneas. La primera instalación une imágenes proyectadas sobre los muros y sobre dos objetos geométricos, la segunda es un espacio blanco dividido en tres, con luces de color. Aquí se pasa de la contemplación al “vivir el color” en sí mismo, a sentirlo. Nos traspasa, nos atraviesa.

El recorrido por la muestra nos lleva desde sus primeras obras figurativas, pasando por los primeros cuadros en donde la bidimensionalidad es concreta, para luego introducirnos en aquellos donde el color sale hacia afuera. Ayudó al logro de esto el trabajo del artista con elementos insertos en la bidimensionalidad. Acompañan esculturas, bocetos sobre las obras, las dos ambientaciones nombradas anteriormente, y un sector con sus proyectos arquitectónicos acompañados de un video donde podemos contemplar sus intervenciones en el ámbito urbano.

Esta primera y seria retrospectiva sobre la obra de Cruz-Diez es imperdible. Porque el mero relato del recorrido no alcanza para transmitir la experiencia del mismo, la huella que queda marcada en el espectador, la sensación de ser invadido y penetrado por el color. Estamos invitados a “vivir el color” y abrir así nuestra propia percepción del mismo, así como a participar activamente en la obra.


Publicado el 27/9/2011
Link directo a la reseña: http://www.ramona.org.ar/node/39275

domingo, 11 de septiembre de 2011

Reseña sobre la muestra "Recortes de Inventario"

"El Coleccionista y el Collage"

Artista: Eduardo Stupia
CC Recoleta - 26/8 al 25/9/2011
Publicado en ramona web


El mundo entero puede caber en la superficie bidimensional de un cuadro a través del collage. Lo más disimil puede entrar en contacto y cobrar significación, lo más similar puede diferenciarse, oponerse. Todo fragmento  descontextualizado se une a otros formando un todo nuevo. Ejemplos del empleo de dicha técnica se encuentra con el surgimiento de las vanguardias históricas, a principios del siglo XX. El objeto, inserto en el lienzo, no sólo rompe la bidimensión y aporta significado, sino que provoca un quiebre en el canon tradicional artístico que se seguía hasta ese momento.

Como bien dice el panel de presentación de la muestra, Eduardo Stupia es un coleccionista, un recolector de revistas, libros , fascículos, boletines, etc. que sirven de materia prima para su obra, así como son fuente de inspiración. Si se piensa que en el collage se juega el azar, es un error. Hay cálculo, hay relación, hay estrategia. Porque las partes vinculadas son elegidas adrede y su relación se establece con un sentido especial. A ésto se suma el plus de significación que cada receptor aporte a la obra, extraiga de ésta.                               

Stupia no sólo se vale de recortes sino que los une también a la pintura, al dibujo, a objetos, usa hojas de libros, fotografías. La bidimensionalidad se rompe con la tridimensión otorgada por algunos de ellos. Varias de las obras  se presentan en series siguiendo una técnica determinada que las agrupa, por ejemplo los collages de retratos recortados y rearmados. La unión de fragmentos puede ser aleatoria, como suele ocurrir en el collage, pero el significado que cobra lo reunido no lo es. Si bien las obras pueden cobrar múltiples significados según el espectador que las contemple, siguen un hilo común de sentido que les otorga coherencia. Se produce una pérdida de identidad de lo fragmentado, pero al mismo tiempo se crea una identidad nueva, enriquecida, modificada.   
   
 
                                                     
Entra en juego también la palabra. Frases recortadas y unidas en un espacio común, en distintos idiomas a veces, sobre distintos temas. Llaman la atención las imágenes de carácter enciclopédico, ya sea de personajes históricos como del mundo natural, animal, vegetal. También encontramos hojas de libros formando una serie específica. Da la sensación de encontrarse dentro de un gran compendio de saberes, de información, de datos. Se presenta como un todo integrado por partes que si vemos por separado notamos arrancadas de su contexto, pero que no pierden su coherencia en el nuevo lugar que ocupan, ni en la relación que establecen con lo que los rodea.                           

El artista se sumerge en un universo infinitamente rico en material al cual selecciona, otorga valor, une o reune, resignifica. Se apropia de aquello que representó algo para él y lo utiliza, lo modifica, le encuentra relación con otra cosa. Así constituye un texto nuevo  mediante textos anteriores, una nueva imagen con retazos de imágenes previas, todo de diversa procedencia pero de invaluable riqueza. Riqueza que salta a la vista al contemplar cada cuadro, cada composición y que llama al espectador a encontrar la relación, el significado, a sorprenderse, a descubrir. Cada cuadro nos invita a recorrerlo con la mirada, a encontrar en él el juego de relaciones, la concordancia, la vinculación. Nos muestra como gracias al collage,  técnica siempre actual y reactualizada,  el artista se conecta con el carácter lúdico del arte. Stupia juega al seleccionar y al unir, al intervenir, al crear.        
                     
                                                             
Acompañan en la muestra a las obras de Stupia dos series de Gabriela Di Giuseppe y Rosana Schoijett, que entran en vinculación, complementan y completan la idea de la muestra.           




Fotos de autoría propia. Publicado el 11/9/2011
Link directo a la reseña y más imágenes: http://www.ramona.org.ar/node/38918

martes, 6 de septiembre de 2011

Reseña sobre la muestra "Fragmentar el Universo"

"Acerca de la Fragmentación del Universo"

Artistas: Luis Espinosa - Miguel Ángel Giovanetti
CC Recoleta - 12/8 al 11/9/2011
Publicado en ramona web

Luis Espinosa
El hombre es un fragmento del Universo, caótico y complejo. A su vez, cada individuo está fragmentado, escindido. Es la unión de mente-cuerpo, alma-razón, conciencia-inconsciente. Desde tiempos antiguos hemos buscado aprehender lo infinito, para poder comprender nuestra propia finitud. Hemos encasillado, recortado, estructurado. Nos hemos mirado y buscamos tratar de comprendernos y de coexistir con el caos que nos rodea.

Luis Espinosa
Luis Espinosa y Miguel Ángel Giovanetti continúan produciendo en un diálogo enriquecedor que los estimula, los limita como individuos pero los lleva a la reflexión compleja, creativa, productora. Primero concibieron “Universos Paralelos”, muestra conjunta en la Galería Ro, desarrollada entre abril y mayo del año en curso (http://www.ramona.org.ar/node/36384). Ahora nos presentan una ampliación de lo iniciado en ella, una continuación y profundización de sus reflexiones individuales y en común.

Siguen la línea de trabajo en base al dodecaedro y al pentágono con su significación Platónica. En esta nueva serie el pentágono se pliega, se analiza a sí mismo, se constituye en una mirada autorreferencial. Se desmaterializa, se multiplica, se deconstruye, se vacía y se llena. A su vez no escapa de su propia cualidad de fragmento del dodecaedro. Dicha figura es entendida como caligrama en sí misma, como letra dentro del alfabeto, en este caso, plástico.

Miguel Ángel Giovanetti
Giovanetti llena de color a la figura pentagonal, primero trabajando con líneas dinámicas curvas y luego problematizándola en su interior con la reiteración del pentágono en el pentágono mismo. Se endurece la línea con los bordes rectos, se reproduce en superposiciones la composición de cinco lados. También corta el lienzo dejando vacíos que respetan la forma trabajada.

Espinosa rompe. No sólo al dodecaedro dentro del Cosmos, a la manera de constelación, sino a cada pentágono que lo constituye. Fragmenta, deja vacíos, otorga volumen, inserta color a través de material extrapictórico y pictórico, hace ruido, otorga textura. Inserta también la palabra, el grafismo superpuesto, el recorte enciclopédico. La ruptura es acto consciente que da a luz al todo, considerado múltiple. Sigue la línea iniciada en sus obras para “Universos Paralelos”, sigue jugando con la noción de universo como escritura cifrada. El peso de la palabra, de la definición, la necesidad de describir y estructurar al mundo para comprenderlo se problematizan.

Migue Ángel Giovanetti
Ambos, desde su individualidad, trabajan el fragmento desde el fragmento de mundo en el que viven y crean, desde el fragmento que ellos mismos son dentro del Universo, desde su propia fragmentación. Y unidos construyen y reconstruyen haciendo un análisis intelectual rico y complejo que sostiene teórica e ideológicamente a la obra.

El fragmento puede ser entendido como una parte faltante en algo, así como también puede ser pensado como parte constructiva o constitutiva. Desde esta última línea de pensamiento, el caos cotidiano es llevadero, es sostenible. El vacío en forma de pentágono puede ser pensado como falta, como pérdida, pero también como espacio con significado propio, que resignifica a su vez a lo que lo rodea o contiene. La superposición de pentágonos puede ser vista como saturación, pero también como superposición enriquecida y enriquecedora, como completitud. Los seres humanos somos en gran medida eso: vacío, saturación, superposición de pensamientos cambiantes, complejos, sensaciones y sentimientos. Somos fragmento y totalidad, parte y todo. Somos complejos dentro de un universo complejo que nos supera pero que nos incluye a la vez.

Luis Espinosa
El término “diazoografón” subyace a la obra. Por definición significa atravesar, pasar a través de..., lo viviente (con) escritura, grabado, simbolización. Y aquí es donde tenemos que detenernos: simbolizar es una cualidad constitutiva del hombre, que lo diferencia del ámbito natural. Simbolizar es “hacer cultura”, atravesar la cultura, estar inserto en ella. Fragmentarla, construirla y deconstruirla, significar en ella son operaciones que van mutando con el devenir. La cultura deviene en la medida en que devenimos todos, está en constante cambio, en movimiento. El arte es una forma expresiva que nace dentro del ámbito cultural y que sirve de vehículo para la simbolización. Tiene efecto sobre las consciencias, las atraviesa, las modifica, así como influye en el entorno. Es una forma de canalización y expresión del fragmento individual, es parte que entra en relación con un todo.

Miguel Ángel Giovanetti
Ambos artistas se enriquecen y estimulan mutuamente desde la palabra y desde la forma y, con ambas, nos llaman a los espectadores a abrir nuestra conciencia y nuestra percepción.







Fotos de autoria propia. Publicado el 4/9/2011
Link directo: http://www.ramona.org.ar/node/38773
Publicada en web de Luis Espinosa: http://arteluisespinosa.blogspot.com.ar/2011/09/acerca-de-la-fragmentacion-del-universo.html

Reseña sobre la muestra "Mi Dormitorio"

"Mi Dormitorio"

Artista: Alfredo Benavídez Bedoya
CC Recoleta - 19/8 al 19/9/2011
Publicado en ramona web



Alfredo Benavídez Bedoya nos invita a compartir con él las imágenes ensoñadas del proceso onírico. Con un fuerte carácter expresionista, inclusive remitiendo al expresionismo alemán en Europa y a ciertas litografías de los Artistas del Pueblo argentinos, las obras que vemos colgadas en las paredes nos sumergen en la psiquis compleja del artista, del ser humano. El sexo, la violencia, el arte, la literatura, la ciudad, entre otros, son parte de esta sucesión de imágenes fuertes, contundentes, impactantes. También podemos vincularlo con los dibujos de Escher y con las pautas surrealistas de creación artística a través del interés en el mundo de los sueños.

El sueño como satisfacción de deseos incumplidos, de fantasías reprimidas, así como la pesadilla violenta y desgarrante son material inagotable para la producción artística. Si bien parten del inconsciente individual, forman parte del imaginario común en todos los hombres, así como el arte, la sexualidad, la vida cotidiana. Todo esto se presenta transformado, desplazado y condensado desde la individualidad de Benavídez Bedoya. 

También interviene páginas de libros con acotaciones y personajes, así como juega con personajes históricos y ficcionales. La realidad se desfigura y reconfigura en la forma artística. Se nos abre la puerta al mundo mágico, misterioso y siniestro que conforma la mente humana, a veces indescifrable y paradójica, otras clara y concisa. Lo representado llama a la interpretación por parte del espectador, genera shock, despierta pensamientos y recuerdos, asociaciones infinitas. Porque todos soñamos, despiertos y dormidos, y todos simbolizamos, cada uno a nuestra manera. Por ende no nos resulta ajeno lo que contemplamos, sino que conlleva en sí mismo un carácter familiar y cercano.

El dormitorio del artista se une al dormitorio de todos, donde soñamos con amores, con pasiones, donde se representan nuestros miedos y terrores más siniestros. Donde buscamos el reposo que a veces hayamos y otras veces no. Donde nos desvelamos y entramos en ensoñaciones. Donde descansamos. Y, fundamentalmente, donde nuestro inconsciente emerge, si bien presionado por la barrera de la represión, con sus mecanismos complejos, como texto rico a ser analizado.



Fotos de autoria propia. Publicado el 4/9/2011
Link directo: http://www.ramona.org.ar/node/38774

Reseña sobre instalación de Tiziano Fabris

"Evita: entre el Mito y la Realidad"

Artista: Tiziano Fabris
Museo Evita - 26/7 al 10/8/2011
Publicado en ramona web

Paradigma, mito, realidad. La figura de Eva Perón se juega entre estos conceptos en la obra realizada por Tiziano Fabris en el Museo Evita, denominada “Evita, retrato en esmalte y alquitrán sobre parquet”. Al retrato se suman, a modo de instalación, una vitrina con revistas de la época sobre las obras realizadas durante las presidencias de Juan Domingo Perón, así como dos fotografías de la obra, elementos de la construcción y una proyección. 

retrato en alquitrán sobre parquet
Detengámonos por un momento en los conceptos de paradigma y mito. Un paradigma, según su definición, es un ejemplo; un mito es una fábula, una ficción, una alegoría. Por alegoría podemos entender cierta ficción por la que una cosa representa o significa algo diferente. Es interesante la relación que podemos hacer entre estas nociones y la obra, así como también con la misma figura de Evita. El arte, de por sí, emplea como recurso a la alegoría en numerosos casos, así como muchas obras se convierten en paradigmas estilísticos y representación de mitos universales. Evita, convertida en mito luego de su muerte, siempre fue considerada por los peronistas el ejemplo de mujer valiente, comprometida con las causas sociales y la Nación, fiel a sus descamisados, al General y su proyecto político. Esta “Evita-mito-paradigma”, activa en el imaginario, cobra relevancia absoluta en la realidad que vivimos hoy día, al tomársela como una de las figuras sustentantes de la doctrina justicialista. 

La instalación tiene como eje central al retrato en esmalte y alquitrán sobre parquet, aludiendo a las obras realizadas como medidas de los Planes Quinquenales en materia de vivienda, donde la premisa era generar puestos de trabajo en el ámbito de la construcción para la realización de casas destinadas a las masas obreras. El artista se vale de materiales que simbolizan la intención del plan presidencial, aunándoles al retrato de Eva y la proyección de imágenes de las obras realizadas. Y qué mejor manera de expresar las bases del movimiento que con los mismos materiales que se emplearon para construir el modelo. 

La obra en su totalidad integra al mito paradigmático de Eva con las bases del Justicialismo y la ideología peronista. Una Eva retratada sobre parquet, el piso empleado en las viviendas a las que pueden acceder los obreros, saliendo de los conventillos, gracias a la dignificación que conlleva el trabajo. Eva mítica que protege junto con Perón a las masas obreras. Paradigma de mujer que defiende a los desprotegidos, a los pobres, a los huérfanos, que da trabajo, seguridad social, contención a los más humildes. Mujer que defiende los derechos de género, que otorga a sus pares la posibilidad del voto.

Figura siempre viva, reproducida infinidad de veces, la Eva de Fabris es plasmada en aquello que fundamentó su vida, los materiales que construyeron su propio mito, la acción social y el compromiso político. Aquí arte y política confluyen en significados abiertos, aptos para espectadores diversos. La política tiene mucho de alegoria (ficción) también, sobre todo en la construcción de íconos relevantes a través de la historia. La imagen de Eva es un ícono partidario e ideológico, pero traspasa ese lugar para instalarse en el imaginario social en un espectro mucho más amplio.
 
Siempre entre el mito y la realidad, Eva aparece sobre el parquet fragmentada, porque todo mito se juega entre la ficción y lo real, la figura verdadera. Esto nos remite no a la Eva de los descamisados, sino a la Eva verdadera. Porque toda mistificación aleja de lo terrenal, confiriendo un carácter cuasi religioso al personaje, dejando de lado a la persona en sí. Ella es una y todas juntas, por eso es una figura paradigmática de nuestra historia. 

Lo más relevante de esta construcción realizada en torno a Eva Duarte es que, más allá del mito, tiene sustento en la realidad. Porque su acción política dejó huellas concretas además de ideológicas, hecho que la acerca a lo real confiriéndole el estatus de “mujer-paradigma”. Y eso es lo que llama, a través de la obra de Fabris, a la reflexión....cómo su figura se juega entre el mito y la realidad.

Fotografías de autoria propia, a excepción de la primera titulada. Publicado el 1/8/2011.

Reseña sobre la muestra "Tandem"

"Sorin: Arte Polifacético y Experimental"

Artista: Pierrick Sorin
Museo de Arte Moderno de Buenos Aires (MAMBA) - 26/5 al 24/7/2011
Publicada en ramona web



Pierrick Sorin usa su propio cuerpo y su vida como materia artística, siendo los medios-soporte el video y la instalación. De manera humorística, irónica, trágica, este uso de su Ser como material lo vincula a la performance y al teatro. Sorin es el gran actor dentro de sus propias obras, inclusive en aquellas en las que no aparece físicamente.

Se desenvuelve frente a la cámara sin pudores ni tapujos, haciendo de la vida real ficción y de la ficción realidad. En las pequeñas instalaciones en las que aparece su imagen sobre un tocadiscos, o la que remite a las posiciones sexuales, recurre al humor, a la sátira, para la trasmisión del mensaje. A veces se duplica o multiplica, tomando diversos roles, ampliando los significados. 

Polifacético él, polifacético su arte, Sorin recurre a diversas estrategias apuntando a una apertura de significados frente a la cual el espectador hace que todo cobre sentido. El mismo, recorriendo la muestra, emprende un recorrido sensorial y, sobre todo, emocional: podemos reír frente al tocadiscos sobre el que corre al estilo Buster Keaton, podemos sentirnos agredidos cuando nos “escupe en la cara”, podemos identificarnos con los videos de pequeños hechos cotidianos que todos hacemos, podemos asombrarnos con la idea de que la energía unida puede crear un arcoiris. Se nos pide que nos tomemos un momento para prestar atención, para escuchar. No son obras que uno puede ver al pasar simplemente. Debemos sentarnos, escuchar, leer.....y ese requerimiento de nuestra participación completa la obra y hace que se plantee la reflexión.


Sorin juega con diferentes temáticas y soportes, experimentando y creando a través de ellos, y poniéndose en el rol de artista así como en el de actor de sus propias obras, planteando un enriquecimiento de la misma con su propia participación, y deconstruyendo el mito del artista ajeno a la vida, concentrado sólo en su arte. Se muestra como una persona común y corriente que crea, como todos creamos cotidianamente, quizás sin darnos cuenta, en distintos niveles. El carácter lúdico impera en varias de las obras, llegando a la satirización de lo que se nos presenta como breves obras teatrales. 

El artista experimenta y nos incluye, reflexiona y nos implica e interpela para que participemos en el juego, para que nos abramos a la reflexión y a la interpretación.








Fotos de autoría propia. Publicada el 20/6/2011

Reseña sobre la muestra "Simplemente Doisneau"

"El Cazador Clandestino de lo Efímero"

Artista: Robert Doisneau
CC Recoleta - 13/5 al 17/6/2011
Publicado en ramona web

Un click. Un instante. La eternidad. Así Robert Doisneau logró convertirse en uno de los más importantes fotógrafos del siglo XX. La exposición que reúne 137 fotografías de su autoría en el Centro Cultural Recoleta es un viaje hacia la París del siglo pasado, sus rincones, sus suburbios, su gente, sus noches y sus días. El don de Doisneau radicó en ser un observador minucioso de la realidad, logrando captar, más allá de la imagen en sí, verdaderas esencias.

Su carrera abarcó varias facetas: desde fotógrafo industrial y publicitario de la empresa Renault hasta la fotografía de modas en la revista Vogue, pasando por sus colaboraciones con Henri Cartier-Bresson y Robert Capa, el trabajo para diferentes agencias y el contacto con los intelectuales contemporáneos a él. Pero su verdadera estética se formó en la calle, de manera autodidacta, partiendo de la mera observación y captando el intervalo perfecto, congelándolo para siempre.


“Yo soy un cazador clandestino de lo efímero”. Esta frase, escrita en una de las paredes de la muestra, claramente retrata la cualidad estética del fotógrafo. El día se hace noche: las mujeres de los burdeles, los hombres nocturnos....La noche se hace día: los niños jugando, las parejas besándose.....Los suburbios parisinos, donde él vivió, son paisajes familiares, donde encuentra detalles que sólo un verdadero conocedor puede hacerlo. Así construye su singular poética. Poética que se expande a la gran capital y sus habitantes, sus usos y costumbres, su identidad. El instante es lo efímero, pero al quedar congelado en la toma, queda como registro, como recuerdo, perviviendo en el tiempo. A la caza de la magia de la imagen, Doisneau se ubica como esteta creador de una poética particular, a veces desde la toma armada, pero sobre todo desde la clandestinidad, estando en el momento justo y el lugar indicado, logrando imágenes únicas e irrepetibles, sin ser visto pero mirando en profundidad el contexto circundante. 

Un artista de la fotografía, un poeta de la realidad, un voyeur de la vida cotidiana, sin cotillones ni adornos ni poses estructuradas. La pureza de la espontaneidad y la crudeza de lo común, los besos y la guerra, dos polos tan opuestos, forman parte de su legado estético y documental.






Fotos de autoria propia. Publicada el 30/5/2011
Link directo a la reseña y más fotografías: http://www.ramona.org.ar/node/36982

Reseña sobre Carpani en el SADOP

"Un Arte para los Hombres en Lucha"

Artista: Ricardo Carpani
SADOP (Sindicato Argentino de Docentes Privados) - 16/5 al 16/6/2011
Publicado en ramona web

Hasta el 16 de junio podrán visitarse, en el salón principal del Sindicato Argentino de Docentes Privados (SADOP), obras del artista Ricardo Carpani, en el marco de un homenaje al mismo realizado conjuntamente por el sindicato mencionado y la Agencia Nacional de Noticia Télam en vinculación con la CGT. Previo a la inauguración de la exposición, se realizó una mesa redonda donde participaron Hugo Moyano, Juan Carlos Schmid, Horacio Ghilini, Doris Carpani y Norberto Galasso. 

parte central del tríptico
Se reconoció la labor de Carpani como “pintor de las luchas obreras y populares”, definición acertada si hacemos un recorrido general por las obras del artista. Entre las expuestas encontramos acrílicos de temática social y política, así como afiches originales realizados para la CGT en las décadas del 60 y del 70. Obras como “Centauro Gaucho”, “El Cordobazo”, “Hombre con Caballo” y el tríptico “Quiénes somos, de dónde venimos, a dónde vamos”, así como los afiches pidiendo la liberación de Felipe Vallese y el titulado “Basta” (de los más conocidos de su producción), fueron dados en préstamo por su viuda para la exposición. 

La muestra carece de la curaduría que corresponde a un artista de la talla de Carpani quien, por su trayectoria y actividad política y artística, merece una retrospectiva que ponga en valor su legado. Sobre todo llama la atención la división del tríptico mencionado (“Quiénes somos...”), así como la falta de la fecha de las obras en los carteles explicativos y de un folleto adecuado que explicite los motivos del homenaje y la muestra. 

Más allá de estos detalles organizativos y curatoriales vale la pena poder ver, después de muchos años, varias obras del artista colgadas en un recinto común, ya que la mayoría de las mismas se encuentran desperdigadas, a puertas cerradas al público. 

Interesante es pensar la revaloración que se hace de su obra en el contexto político y sindical actual, en el que se rescatan figuras comprometidas política e ideológicamente con el peronismo, sobre todo pertenecientes a su corriente de izquierda, como es su caso. 

Con sus obras Carpani buscó llegar a las masas, considerando al arte como una herramienta revolucionaria de divulgación y difusión ideológica. El arte era considerado un excelente medio educativo de gran alcance, sobre todo el arte público. Por eso el interés en los murales y en los afiches, y el trabajo con los mismos en los sindicatos que realizó el artista. Ejemplo de esto son “El Cordobazo”, “Basta” y los afiches de Vallese. En las demás obras expuestas, así como a lo largo de su larga producción, ésta fue la base teórica que acompañó a las imágenes, siempre cargadas de un gran simbolismo y compromiso con la lucha de clases. 

En el tríptico podemos ver a los conquistadores, con la fe y la espada, y a los indígenas, a los costados, inmersos en una gran selva que hace de enlace a la pieza central, donde el “ser nacional” se hace presente en la figura del tanguero, del “malevo”. El hombre-centauro y el hombre con el caballo pueden ser interpretados como una alusión a la fortaleza y a lo indómito de la naturaleza humana. El hombre no será doblegado por el capitalismo, será difícil domarlo bajo este régimen. Los tres afiches y el lienzo sobre el Cordobazo llaman claramente a la liberación, individual y de las masas. Las obras buscan despertar la reflexión política y el compromiso por parte del espectador. 


Carpani fue artista, ideólogo, teórico y un luchador incansable por los derechos de los trabajadores y la liberación de las masas oprimidas. Un generador de conciencia y compromiso social a través del arte. 

 
La muestra puede visitarse de lunes a viernes, de 10 a 17 hs, en Tte. Gral. Perón 2625, CABA.

Fotos de autoría propia. Publicada el 25/05/2011
Link directo a la reseña: http://www.ramona.org.ar/node/36964

Reseña sobre muestra "Graciela Borthwick - Antología 1970 - 2010"

"Antología del Inconsciente Colectivo"

Artista: Graciela Borthwick
Museo de Artes Plásticas Eduardo Sívori - 21/5 al 20/6/2011
Publicado en ramona web

“Imágenes de una modernidad periférica”. Bien empleado está el término por Alberto Giudici, curador de la muestra de Graciela Borthwick, para caracterizar la obra de la artista. Lo emplea en un intento de abarcar y unificar la vasta producción, entre 1970-2010, que se expone en el Museo Sívori. En el folleto que recibimos Giudici utiliza este término relacionándolo con el origen santafecino de Borthwick y también con ciertos aspectos materiales e iconográficos de su obra, así como con la línea teórica de Joaquín Torres García. En él la noción de “Universalismo Constructivo”, básica para la Escuela del Sur y el arte latinoamericano soñado por él, plantea la reivindicación de nuestra cultura en contraposición con la del norte y la europea, y se basa en la recuperación de la comunión entre el hombre y el orden cósmico, a grandes rasgos. 

Podemos vincular esta línea de análisis con otra: la producción de Borthwick tiene una profunda vinculación con el inconsciente colectivo. Remite a lo antropológico, a lo primigenio y primitivo. Nos devuelven a la tierra, a lo originario, a un lenguaje común a todos los seres humanos con el que se expresa la psiquis, más allá de la razón. Por ende, nos aproximamos a la obra porque nos llama, nos atrae por formar parte de algo que constituye un lenguaje universal latente en cada uno de nosotros. 

La noción de nomadismo es rescatada por la artista cuando se refiere a su propia producción. Emprendemos un recorrido antológico que nos lleva a hitos en la misma, en la cual la vemos crear empleando distintos materiales y técnicas, símbolos y significaciones. Se sitúa como artista nómade, entonces, en aspectos múltiples. 

Las esculturas en madera tienen un fuerte carácter totémico, de presencia firme y contundente en el espacio. Pero, a su vez, transmiten una sensación absoluta de armonía con el mismo e invitan al recorrido. Lo mismo ocurre con las realizadas en tela: se construye una estructura tridimensional muy firme pero a la vez de carácter endeble. No podemos comprobarlo porque está prohibido tocar las obras...qué experiencia tendríamos a nivel perceptual si tuviéramos la posibilidad?. La habilidad de Borthwick radica en suavizar lo duro (madera) y tridimensionalizar lo plano (la tela). La noción de “esculturas blandas” es extensible no sólo a las colocadas en marcos, sino también a las exentas. Nuevamente, madera – tela- cerámica, nos remiten a los materiales primigenios. El táctil es el primer sentido que se despierta frente a las esculturas. Bordes suavizados, texturas pulidas, tela de múltiples colores. Todos los sentidos terminan despiertos en el recorrido. Son obras que llaman al despertar de la percepción.

En las series bidimensionales, dibujos y pinturas, la iconografía es de una pureza sutil. Los retratos nos transportan a las máscaras primitivas. La simplicidades en los trazos impera, lo cual hace de la simbología algo accesible, sin rebusques. Imágenes comunes a todos, reconocibles para todos. Borthwick nos demuestra cómo desde la sencillez se puede transmitir y significar, expresar y crear mucho. Resaltan las obras de una simplicidad formal absolutas, sin hermetismos sino abiertas de par en par a la interpretación. Y nuevamente nos remite, desde el campo antropológico y psicológico, a lo ancestral, a las raíces, al lenguaje universal. Lo zoomórfico y lo antropomórfico emerge como imagen simbólica. Símbolos que la humanidad lleva en su bagaje inconsciente desde el principio de la civilización. 

También cabe rescatar el carácter lúdico de la producción. Borthwick ha jugado libremente con diversos medios para expresarse, confiriéndoles un carácter único e irrepetible, propio de su estilo original e individual. La obra en general despierta en el espectador (sobre todo en el caso de la escultura como mencionamos), no sólo la mera contemplación, sino también la necesidad de establecer una conexión más allá de la imagen o el objeto.





Fotos de autoría propia. Publicado el 22/5/2011
Link directo a la reseña y más fotografías: http://www.ramona.org.ar/node/36866
 

Reseña sobre "La Torre de Babel"

"Un Recorrido Cultura Reflexivo-Participativo"

Artista: Marta Minujin
Instalación en Plaza San Martín - 01/5 al 28/5/2011
Publicado en ramona web


No es la primera vez que Marta Minujín nos sorprende con sus obras de arte efímero. En este caso, conmemorando la declaración de la Ciudad de Buenos Aires como Capital Mundial del Libro 2011 por parte de la UNESCO, nos presenta “La Torre de Babel”, proyecto en el que venía trabajando desde que realizó el mítico “Partenón de Libros”, en 1983. En aquel momento, la celebración fue el retorno a la democracia, por lo tanto la obra estuvo compuesta por libros prohibidos durante la dictadura militar. Hoy la obra tiene una carga simbólica distinta. 

La estructura de la Torre son 30.000 libros de 54 países en diversos idiomas, acompañados por un video con locución que dice la palabra “libro” en distintos idiomas, además de música compuesta por Minujín . Los mismos, serán donados a la Biblioteca Manuel Galvéz, una vez concluído el tiempo de exposición. También, el día del cierre, se regalarán los libros dispuestos en el primer piso de la estructura a los concurrentes. 

Inspiración básica para la obra fue el cuento de Jorge Luis Borges “La Biblioteca de Babel”. La idea central es la del universo como biblioteca, estructurado geométricamente, donde los hombres “peregrinan” en busca de un libro. Biblioteca infinita, inacabable, abarcativa de todos los libros habidos y por haber. Sensación que tenemos al recorrer, subiendo y bajando por las escaleras, la estructura recubierta de ejemplares diversos cuando descubrimos algunos que conocemos, que leímos, que están en otro idioma, que quisiéramos tener, sobre diferentes temáticas....la obra nos llama y nos sorprende, nos hace sentir en su devenir espiralado. 

Llegamos al último piso y sabemos que debemos comenzar a bajar: la biblioteca, la torre, no son infinitas. Pero las formas de comunicación, de expresión, son múltiples y abiertas a todos. Rescatamos la idea de Minujín, de que entre los argentinos estamos en un momento histórico en que hablamos en distintas idiomas, aunque lo hagamos en la misma lengua. La comunicación muchas veces es interferida, nula, asemeja a un teléfono descompuesto. Pero Minujín no pierde la esperanza. Al contrario. Concibe esta magnífica torre efímera en un momento donde todo parece tener ese carácter a veces, debido a la tecnología y los medios de comunicación masivos. Pero lo hace justamente para rescatar aquello que no es efímero, que siempre perdura, que es la cultura. El arte, la literatura, siempre estarán como medios de expresión del hombre, y como cable a tierra también, indispensables para no perderse en la vorágine del mundo globalizado.

Los aspectos a rescatar son el carácter de biblioteca multilingüe, donde conviven la diversidad y la particularidad ( a nivel temático y lingüístico) en un mismo espacio. Qué mejor expresión de la realidad de nuestra ciudad, donde convivimos diversas colectividades constituyendo una identidad rica y compleja. Los libros fueron donados por distintos países y colectividades, y aquí vemos otro aspecto que es el de la construcción de lo colectivo desde la singularidad, no sólo del libro individual, sino del artista como sujeto particular. Analogía posible con la cultura, que también se construye a partir de singularidades, conformando un colectivo abarcativo de las mismas.También de cómo el arte, en su singularidad, es parte integrante del fenómeno vasto cultural de una sociedad. 

Siempre las obras de Minujín abren diversas interpretaciones, y la posibilidad de participar del espectador es parte fundante de la obra. Amplia la conciencia y la relación directa con el arte, dejando de lado cánones preestablecidos y manteniéndose en la delgada línea entre la obra “formal” y la performance, el arte participativo y vivencial. Aquí uno de sus mejores exponentes después de mucho 




Magnífica concepción de Minujín, que siempre nos sorprende con sus creaciones, donde obra y espectador se funden en uno, y la reflexión es parte integrante e indispensable de la experiencia.tiempo. 

 


La obra podrá visitarse hasta el día 28 de mayo, previa solicitud de turno online en http://www.capitaldellibro2011.gob.ar/torredebabel/
 
 
 
 
 
 
Fotos de autoria propia. Publicado el 17/5/2011
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